Hipocalcemia
La hipocalcemia se presenta cuando la vaca es incapaz de movilizar una cantidad suficiente de calcio alrededor del parto. Esta sección tiene el propósito de ofrecer una mejor comprensión del desafío que implica para los productores lecheros el control de la hipocalcemia subclínica y clínica.
Consulte siempre con su médico veterinario para que le brinde un diagnóstico y asesoramiento adecuados.
Definiciones
¿Qué es la hipocalcemia?
La hipocalcemia es una deficiencia de calcio. La enfermedad tiene una forma clínica y una forma subclínica y afecta a las vacas en su momento más vulnerable: durante el período de transición. La vaca necesita una gran cantidad de calcio inmediatamente después del parto: inicialmente toma el calcio presente en la sangre y luego lo toma de la dieta y los huesos. Si es incapaz de movilizar una cantidad suficiente de calcio, el animal afectado no podrá mantenerse en posición de pie correctamente y tendrá menor apetito, lo que ocasionará problemas de salud y desempeño.
Síntomas
Síntomas de la hipocalcemia
Hay dos formas de hipocalcemia: clínica y subclínica.
Síntomas de la hipocalcemia clínica
Una vaca con hipocalcemia clínica presentará signos de deficiencia severa de calcio: no podrá mantenerse de pie y se percibirá fría al tacto.
Síntomas de la hipocalcemia subclínica
A pesar de tener una incidencia mucho más alta que la hipocalcemia clínica, los efectos de la hipocalcemia subclínica a menudo se subestiman. Si bien la vaca afectada podrá estar de pie y funcionar en gran medida normalmente, su desempeño será mucho menos eficiente debido a la deficiencia de calcio subyacente y estará mucho más vulnerable a las enfermedades. Aumentará la incidencia de problemas como mastitis, infecciones uterinas, endometritis y retención de placenta.
Causa y efecto
¿Cómo prevenir la hipocalcemia?
La demanda de calcio de la vaca aumenta significativamente a medida que se acerca el momento del parto. Se requiere una gran cantidad de calcio para el mayor crecimiento óseo del ternero nonato y la producción de calostro.
Para satisfacer esta demanda, la vaca primero toma calcio de la sangre. Como esto no alcanza, la vaca necesita movilizar más calcio a partir de la dieta y los huesos. La mayoría de las veces la vaca no logra obtener una cantidad suficiente de calcio, lo que lleva a la hipocalcemia subclínica y clínica. En general, las vacas adultas son más vulnerables a la hipocalcemia subclínica y clínica que las vacas más jóvenes.
¿Cuáles son las consecuencias de la hipocalcemia?
Si bien la hipocalcemia clínica puede ser mortal, los casos de hipocalcemia subclínica también pueden tener un impacto serio debido a la menor producción de leche, al costo y al tiempo necesarios para que la vaca recobre la salud completamente.
Mientras los síntomas evidentes están ausentes, los casos subclínicos de hipocalcemia pueden ser la entrada para un aumento de mastitis, placenta retenida, endometritis, infecciones uterinas y otras enfermedades debido a que el sistema inmunitario está debilitado. Esto tendrá un ostensible efecto perjudicial en la producción de leche, aumentando la demanda de tiempo, energía y altos costos financieros hasta que la vaca recobre la salud completamente.
Soluciones
Reducir los casos de hipocalcemia
Comience por evaluar el contenido de macrominerales de todos los forrajes que serán administrados a las vacas secas, seleccione los forrajes con bajo contenido de potasio y formule la ración para minimizar su contenido de potasio todo lo posible y usar ingredientes palatables.
Animate ayuda a reducir la hipocalcemia subclínica y clínica. Un metabolismo del calcio optimizado alrededor del parto da lugar a vacas lecheras más saludables y productivas. El agregado de Animate a la ración de las vacas preparto permite que las vacas puedan movilizar más calcio y comenzar la lactancia con más leche y menos eventos sanitarios.
Tratamientos
Cómo tratar la hipocalcemia
Las vacas caídas típicamente se tratan con calcio por vía intravenosa. La aplicación por vía subcutánea y las fórmulas de calcio de administración oral se usan para tratar los casos más leves o sospechosos. Cabe destacar que estas formas diferentes de calcio no son equivalentes. En los tratamientos de calcio hay mucho más de lo que parece a simple vista; como cualquier otro tratamiento, solo se los debe administrar con el asesoramiento de un veterinario.
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